Afectado, sobre todo, por los graneles, el tráfico disminuyó un 12%

El puerto cerró el pasado ejercicio con un beneficio neto de 5,03 millones de euros. Este resultado económico se alcanzó pese a la disminución de los tráficos en algo más del 12% con relación a 2018, que se vieron afectados sobre todo por la disminución en el capítulo de graneles, en el que se importaron 1,8 millones menos de carbón térmico, así como 1,9 millones menos de carbón siderúrgico y mineral de hierro.

Sin embargo, creció el número de toneladas manipuladas por los muelles comerciales; en concreto, un 12,2% en los productos siderúrgicos y casi un 4% en las mercancías transportadas por contenedor, una cifra que por primera vez supera el millón (de 965.285 toneladas en 2018 se ha pasado a 1.003.615 en 2019). Asimismo, el carbón por los muelles comerciales aumentó un 89% hasta alcanzar los 2,1 millones de toneladas.