Empezó a funcionar en 1861 con una luz fija blanca variada por destellos de 4 en 4 minutos que se divisaba a 22 millas para lo que estaba dotado de un aparato giratorio de 3º orden con una lámpara de aceite de oliva.
El combustible se sustituyó por parafina y posteriormente por petróleo hasta que se electrificó.
En 1926 se le fija la apariencia de grupos de 2 + 1 destellos blancos que tiene en la actualidad, para lo que se electrificó y se sustituyó tanto la linterna como el aparato óptico, entrando en funcionamiento en 1930.