La Autoridad Portuaria de Gijón acomete con esta propuesta cultural, uno de los ámbitos marítimos más apreciados a nivel popular como es la del modelismo naval, una pasión, más que afición que nos permite adentrarnos en la arquitectura naval histórica.
La retrospectiva sobre unos barcos que o bien marcaron una época por el diseño de su línea o consiguieron hacerse famosos por su épica andadura en los distintos océanos, así como la relación estrecha de muchas de estas naves con el Puerto de Gijón, es el motivo de esta muestra en la que queda patente la paciencia en el diseño, la pericia en la construcción y sobre todo el rigor de reproducción a escala.
Así, podemos contemplar entre otros, el buque escuela Juan Sebastián Elcano, que durante décadas viene desempeñando una función formativa de los marinos de la Armada; los navíos de complicado aparejo como el Montañes; los costeros habituales en el cabotaje cantábrico como el Amador (que navegó 42 años), el Velázquez, el Sotileza y el Lolita Artaza.
Si hablamos de frecuentar el puerto, quizá ninguno lo haya hecho tantas veces como el Cementador; hay réplicas de los que se puede decir que “viven en el puerto de Gijón”, como el patrullero Mouro y el remolcador Sella; pesqueros como La Emperatriz, que tanto bonito vendió en la Rula de Gijón o los de apariencia intimidatoria como buques de guerra, caso del crucero Almirante Cervera.
Fecha de exposición:
Marzo-Mayo
2006